Cuba está expandiendo rápidamente su infraestructura de energía solar en un esfuerzo por abordar una crisis energética cada vez peor. Cerca del sitio abandonado de una planta de energía nuclear de la era soviética en Cienfuegos, los trabajadores están instalando 44,000 paneles solares. El proyecto es parte de un impulso más amplio por parte del gobierno cubano para reducir su dependencia del petróleo importado y hacer la transición a fuentes de energía renovable. La isla ha enfrentado apagones frecuentes y escasez de combustible, lo que ha llevado a una acción urgente para diversificar su mezcla energética. Esta iniciativa solar marca un paso significativo en la estrategia energética a largo plazo de Cuba.
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